lunes, 27 de julio de 2015

Yo acuso... a Javier Cercas: el gran impostor. (Castellano)



La última novela de Cercas «El impostor» es sobre Enric Marco. Cercas lo considera el “monstruo de la impostura”, “el Maradona de la impostura”.
Enric Marco es un un antiguo miliciano de la revolución, seguramente de los pocos que quedan vivos y con la cabeza bien clara, un militante anarcosindicalista, ex secretario general de la CNT en Cataluña y España, víctima del franquismo y nazismo. Estuvo explicando el horror nazi en escuelas, instituciones y Parlamento, haciéndose pasar por haber estado deportado. Se le lincha por esta falsedad en los Medios de desinformación que padecemos. Cercas le remata en “El impostor”, de 421 páginas y aprovecha para reescribir la historia a su conveniencia, como ya es habitual en sus novelas.


Comienzo por una anécdota:

En la portada del libro está la clave: JAVIER CERCAS. El impostor. El gran impostor es en Cercas. El diseño lo ha debido crear algún subversivo. La imagen muestra un tipo gris, clase media, oficinista, de la edad de Cercas, que se esconde, y un nombre con mayúsculas, JAVIER CERCAS, y el calificativo El impostor. El hombre de la edad de Cercas, se tapa la cara, observa a escondidas entre sus dedos. Se trata evidentemente de un verdadero lapsus freudiano, de orden psicoanalítico.

La falsa novela "El impostor" es una impostura.
Es un engaño del inicio al final. Un gran engaño sobre la vida de Marco, una manipulación de la Historia y un fraude a los lectores. «El impostor» del Cercas es vomitivo y tóxico. Prosa de mercenario.
La novela es un ejemplo de cómo el Sistema controla y destruye los disidentes. Es un ejemplo de un escritor al servicio de los que mandan. No recomiendo la novela, a no se que se quiera investigar cómo nos influyen, cómo nos controlan, cómo se manipula la Historia. Revisionismo bien pagado y publicidad oficial.

¿Cómo puede ser que Cercas, para denunciar un supuesto impostor, deba construir una gran impostura con aroma venenoso de alcantarillado moral?


«El impostor» es un dossier policial y psiquiátrico.


“El impostor” no es una biografía de Enric Marco. Tampoco es una autobiografía de Cercas, ya que él explica cómo va construyendo la novela. Tampoco es una novela real, no ficticia, como la llama  Cercas. «El impostor» es el resultado de una investigación policial y también psiquiátrica, completamente inventada utilizando fechas biográficas de Enric Marco desde el nacimiento. Es un dossier inquisitorial, que le han dado masticado, que Cercas ha novelado, pasándolo a limpio, según escribe él. Una investigación destructiva, terrorista, siniestra, como son las de la policía política y de los psiquiatras al servicio de la policía.


Hay dos personajes falsos, sacados de la realidad.

1. Cercas es el investigador de "la verdad" de Enric Marco. Un personaje totalmente falso y repugnante. Se erige en investigador de la verdad y juez a la vez. Se designa como el inmaculado portavoz de la verdad, poniendo una máscara inmunda a su mezquindad. Pronostica que "el libro matará a Enric Marco". Toda la farsa se basa en unos psiquiatras, que no nombra, anónimos, que han diagnosticado a partir de la escoria mediática, a Enric Marco de "Narciso de manual". Unos psiquiatras, tal vez del CSID o de cualquier otra institución policial, que diagnostican a distancia y elaboran cuestionarios para clasificar disidentes.

La realidad es diferente: El personaje que en la novela hace de Cercas es un inquisidor, un Torquemada, un verdugo y también un comisario político. Cercas des-valoriza todo lo que representa Marco. Aprovecha para desprestigiar a los anarquistas, para reescribir la Historia y arrasar con la memoria histórica. Cercas hace creer que representa la verdad histórica, que es la de los ganadores de la guerra, la de los asesinos, la de los que mandan ahora y le pagan. La impunidad de los criminales es la ley que impera. Enric Marco es el cabeza de turco.

2. Enric Marco es el falso héroe, un mentiroso compulsivo de toda la vida, según el pseudo investigador Cercas, o según los investigadores policiales que le han asesorado. Resaltan que Enric Marco nació en un manicomio, de una madre loca, y el equipo de investigadores y psiquiatras concluyen que es «un narciso de manual", y evita mirarse en el espejo para no morir. Le clasifican de persona con un gran ego. Cercas y cía interpretan que se fabricó otra vida para escapar a su oficio de mecánico, a una vida triste, aburrida, monótona. Como escribe Cercas, son las vidas de  trabajadores. Seguramente es una proyección de la vida aburrida, monótona, triste, de oficinista y poco creativa del Cercas. Todo el día escribiendo para las élites. ¿Cómo lo puede aguantar un tipo que se llama de izquierdas? Un caso de psiquiatría...

Cercas escribe para hacer de espejo, para mostrarle la verdad a Enric Marco y así liquidarle. Se obsesiona con la leyenda de Narciso. La repite como un tantra a lo largo de la novela: Narciso muere cuando se mira en el espejo. De hecho, “El impostor” es el reflejo y espejo de Javier Cercas, y si tuviera algo de sensibilidad al menos debería morirse de vergüenza.

Cercas insulta a Enric Marco calificándole de repugnante, desagradable, y un sinfín de improperios que no quiero enumerar. Un dossier letal lleno de mentiras, escritas a conciencia, mezcladas con algunas verdades, destinado a cambiar la vida de un gran hombre.
El siniestro Cercas interroga, como Torquemada, y la víctima termina confesando, según la fantasía de mosquito del Cercas. Para completar el cuadro, Cercas confiesa  que ha disfrutado mucho escribiendo este libro.

El Enric Marco real tiene poco que ver con el del “El impostor”. En realidad es un miliciano superviviente de la Revolución del 36, un ex militar destacado en la guerra civil en defensa de la República, un resistente y opositor al franquismo y al nazismo, un líder sindical ejemplar en la transición, un líder de la memoria histórica de las víctimas del franquismo y del nazismo.
Por todo ello es objeto de una investigación especial, para anularle. Y ahora, a los 94 años, resiste y denuncia como lo ha hecho siempre. Un gran y admirable militante, un altruista, lo contrario de “un Narciso”. Una vida dedicada a los demás. Una vida ejemplar, se esté o no de acuerdo con sus posiciones políticas.


El autor, un falso novelista

La impostura del Cercas es hacerse pasar por novelista con el objetivo pernicioso de ensañarse con un militante de 94 años, indefenso y víctima de un linchamiento mediático.

Javier Cercas es un escribano hábil y prostituido. Es un funcionario leal y dócil con los Poderes instituidos. Lo descubrió Vargas Llosa, el pontífice máximo del neoliberalismo ultra, un reaccionario con máscara de socialdemócrata. Cercas es su discípulo de provincias. También es un neoliberal con piel de Izquierdista, antifranquista e incluso ateo (según Wikipedia). Maestro y discípulo se ven a menudo. Cercas firmó un comunicado de Vargas Llosa contra el catalán.

Cercas es un cobarde. Se atreve con los débiles, pero no con los poderosos. Destroza con mentiras a Enric Marco sin compasión. Es un cínico, ya que le dijo que sólo quería rehabilitarle, escribir la verdad.
Lo que no se atrevió a hacer el miliciano del Collell, fusilar a Sánchez Maza, el ideólogo falangista, es lo que ha hecho el mercenario Cercas con el anarquista superviviente de la Revolución, Enric Marco. Cercas ha disparado contra un antiguo miliciano de verdad sin compasión y por el dinero.

Cercas es un perverso. Desacredita e insulta a Enric Marco en los medios de comunicación, donde campa como por su propia casa, mientras Marco no puede expresarse, ni defenderse. Cercas es un vulgar vampiro de geriátrico, chupando la sangre a un venerable anciano, a un miliciano y militar de la República.

Javier Cercas es un difusor del pensamiento dominante y de las mentiras criminales del Imperio. Es un escribano muy bien pagado, en proporción directa a los servicios prestados.

El inquisidor Cercas sólo recoge lo que puede parecer negativo de Marco, o lo bueno que puede transformar malo. Lo cambia todo, amplifica alguna contradicción e intenta que confiese. Se la pasa arrancando informaciones a los amigos, familiares y al propio Marco. Proyecta, interpreta, supone y miente sólo en un sentido: la vida de Marco es una gran mentira. En cambio la vida ejemplar de luchador, resistente, formador, buen compañero, no le interesa al pseudo-investigador Cercas.

¿Serías capaz, Cercas, ponerte la lupa de aumento sobre ti? ¿ Te gustaría que te echaran encima los dóberman que tú has lanzado?


¿Quien ha hecho el encargo?

 Ilustración de Roser Pineda

Seguramente en Vargas Llosa. Quizás sólo como intermediario. En una de sus cenas le dice a Cercas: "Marco es un Personaje tuyo. Tienes que escribir sobre él".
Conocer quién ha hecho el encargo es importante para analizar correctamente la novela, donde el impostor Cercas hace de investigador de la verdad, psiquiatra, psicoanalista e historiador, sin serlo.

¿Qué fines?

La investigación final hecha por el equipo del Cercas, es sesgada y tiene una finalidad criminal, la de desprestigiar y controlar completamente y sin piedad a Enric Marco. Anularle, matarle.

¿Cómo se hace?  

Con un dossier como el que ha hecho Cercas, con un control absoluto de la persona. Cercas ha seguido el manual de las policías políticas actuales. Los que tienen el poder controlan a personas, a políticos y a disidentes. Los que controlan el pasado, controlan el presente. Por eso promocionan a Cercas. Esta es la finalidad primera, manifiesta y necesaria. Del dossier policial ya hablaremos. Según Cercas, la información se la dieron ya hecha.

La finalidad no dicha, pero manifiesta a lo largo del libro, es desprestigiar todo lo que representa Enric Marco: el miliciano que combate con armas a favor de la Revolución, el militar que defiende la República, los ideales anarquistas, la memoria histórica de las víctimas del franquismo, el anarcosindicalismo.

Otra finalidad de la novela de Cercas, es la de proteger y ocultar los verdaderos impostores,  los que dicen mentiras criminales y delictivas, que es el pan de cada día, sus amigos: la mafia de El País, Vargas Llosa y Cía.

Cercas hace creer que todo lo bueno que ha hecho Marco y todos sus ideales, son una impostura,  una estrategia de mentira para alimentar un monstruo, una persona ficticia que se ha inventado.

Estas estrategias profesionales y perversas para hundir a Enric Marco no se las ha inventado el oscuro, mediocre y pseudo novelista, que es Cercas. Alguien le ha ayudado ....

Resumiendo: el impostor Cercas se carga a las víctimas del franquismo y a la reducida e inexistente memoria histórica de las víctimas, a la CNT y al movimiento libertario, y al Marco, como hipérbole de la impostura.



Gráfico ÇRoser Pineda
 

Enric Marco es un irreductible y no se arrepiente de lo que ha hecho y menos de todo lo bueno y de sus luchas libertarias.
No se ha dejado controlar por Cercas. Ni confiesa. Todo lo contrario. Le está denunciando por mentiroso, estafador, impostor, a pesar de no tener acceso a los medios que nos controlan.
Sin confesión, las 421 páginas del Cercas no sirven. Cercas le hace algunos elogios para seducirle, para engañarle mejor, al igual que a los lectores. Le hizo un regalo que le encontró uno de sus colaboradores: una nota en la que está escrito, y por tanto certificado, que fue un militar destacado de la República, en "La Vanguardia" del 29 de septiembre 1938. No es "la vanguardia española ", como sale en el encabezamiento de la noticia escaneada. Sino simplemente "la Vanguardia". Un error de "El impostor" que no tiene nada que ver con la naturaleza esencialmente hipócrita del Cercas. Cercas le intentó engañar para obtener la confesión, como lo hacen los policías "buenos" en los interrogatorios. Le animaba a confesarse a él con mentiras: Le hacía creer que el malo Benito Bermejo estaba escribiendo un libro contra él y por tanto le argumentaba que era mejor se confesara con él, porque él estaba a su favor. El hipócrita Cercas le hacía creer que estaba a favor de él!  Un mentiroso, un impostor. Cercas queda auto-retratado como interrogador policial.

La Mercè Mas
El marido de Mercè Mas es Cercas. Parece que ella lo quiere dejar: es una buena noticia de la novela. La Mercè era de nuestra pandilla de la Bisbal, una flor especial de la bohemia y la contra-cultura, y también militante de la CNT en la Bisbal a los inicios de la transición. Le gustaba mucho el teatro. La Mercè lo envió al psicoanalista.
Creo que con este libro "El impostor", la impostura del Cercas habrá aumentado y sus traumas y perversidades habrán empeorado. Ahora la Mercè lo deberá enviar al psiquiatra.
 Ilustración de Roser PinedaLa otra buena noticia del libro son los dos análisis de la Mercè sobre el caso Marco. Son muy breves y de sentido común, análisis que desmontan la falsa novela de su  Ilustración de Roser Pinedamarido. Son estos:
- ¿Y a quien ha hecho daño Marco con esto (la mentira de encarnarse en víctima nazi)?
-Lo que no entiendo es que se encarnizasen con él como se encarnizaron, cuando hay por ahí tantos sinvergüenzas que han provocado muertes, que han robado y han hecho toda clase de porquerías y no es que nadie se meta con ellos: es que todo el mundo les lame el culo.

La Mercè convive con uno de los más grandes lameculos e impostores. No es para alegrarnos. El falso Cercas le dedica una novela falsa, tóxica y criminal, como si fuera una novela original, un libro decente, una novela que rehabilita al linchado y estigmatizado Marco. Todo al revés.

Cercas no debería haber involucrado a Mercè en este libro vomitivo ni tampoco su hijo Raül. No le veo la gracia el dedicar un libro tóxico a las personas que más quiere. No está bien de la cabeza. No debería haber utilizado a su hijo Raül de cámara para grabar las entrevistas para liquidar un militante de 94 años. Unas grabaciones que luego deberían analizar especialistas en el control social y manipulación de personas.

Unas sugerencias para el caso psiquiátrico «Cercas»,

Remedios terapéuticos gratis, naturales, sin profesionales de por medio:

El primero.
Dejar de ser un lameculos, un quintacolumnista, un traidor, un espía, un infiltrado, es decir, un impostor. Esto sería un gran paso hacia la decencia y la autenticidad.

El segundo.
Que Cercas se atreviera a escribir  un libro contra los grandes y reales impostores, los que han mentido criminalmente, como Aznar, Rato, Rajoy, Vargas Llosa y la mayoría de políticos con poder y periodistas a su servicio. El pobre Cercas debería renunciar a ser traducido, adulado como buen escritor por 4 lameculos de El País. Debería renunciar a ser difundido globalmente. Y cobraría mil veces menos.

Tercero.

Tener el valor de retirar "El impostor" de todas las librerías. Algunas ya lo han hecho cuando han tenido conocimiento de que es un libro tóxico y una falsa novela.


Txema Bofill, txemabo@gmail.com


Cuando escribí estas líneas no había terminado el libro. El resto del libro confirma estas pequeñas notas. Y puedo decir que me quedo muy corto, de momento.

Continuaremos
Web, donde recogemos información sobre Javier Cercas y Enric Marco:

http://contra-javiercercas.blogspot.com.es/


1 comentario:

  1. http://cotarelo.blogspot.com.es/2013/09/el-nacionalismo-catalan-segun-cercas-y.html

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